[1848] • JUAN PABLO II (1978-2005) • TRANSMITIR A LAS NUEVAS GENERACIONES EL “HUMANISMO FAMILIAR”
Del Discurso In questa bella, en la Plaza Mayor, Bolonia (Italia), 27 septiembre 1997
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El humanismo familiar
6. Queridos padres, que habéis venido de todas las regiones de Italia, os dirijo a cada uno mi saludo más cordial. Habéis venido con vuestros hijos a adorar a Jesucristo en el sacramento de la Eucaristía. Soléis honrarlo llamándolo con el nombre de Esposo de la Iglesia esposa.
Conozco vuestra generosidad, vuestro compromiso y vuestra paciencia en las dificultades y en las pruebas que cada día debéis afrontar. ¡No tengáis miedo! Habéis abierto la puerta de vuestra casa a Cristo; más aún, habéis querido construir vuestro hogar sobre la roca de su palabra. Cristo protegerá a vuestras familias de cualquier asechanza del maligno.
Procurad transmitir a las nuevas generaciones aquello en lo que creéis y esperáis, acompañando su crecimiento para que se transformen en personas maduras, capaces de gastar su vida por sus hermanos y de hacer de su existencia un don sincero al prójimo. Así serán artífices del “humanismo familiar” que la sociedad italiana necesita con urgencia.
[OR (e.c.) 3.X.1997, 7]
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6. Cari genitori qui giunti da tutte le regioni d’Italia, rivolgo a ciascuno di voi il mio saluto più cordiale. Siete venuti con i vostri figli ad adorare Cristo Gesù nel sacramento dell’Eucaristia. Voi amate onorarlo chiamandolo col nome di Sposo della Chiesa sposa.
Conosco la vostra generosità, il vostro impegno e la vostra pazienza nelle difficoltà e nelle fatiche con cui ogni giorno dovete confrontarvi. Non abbiate paura! Voi avete aperto la porta della vostra casa a Cristo, anzi avete voluto costruire il vostro focolare sulla roccia della sua Parola. Cristo salverà le vostre famiglie da ogni insidia del maligno.
Abbiate a cuore di trasmettere alle nuove generazioni ciò in cui credete e sperate, accompagnandone la crescita perchè diventino persone mature, capaci di spendere la vita per i fratelli e di fare della propria esistenza un dono sincero al prossimo. Saranno così artefici di quell’“umanesimo familiare” di cui la società italiana ha urgente bisogno.
[OR 28.IX.1997, 5]