Warning: Undefined variable $limit in /var/www/vhosts/enchiridionfamiliae.com/httpdocs/cabecera.php on line 6
Magisterio sobre amor, matrimonio y familia <br /> <b>Warning</b>: Undefined variable $titulo in <b>/var/www/vhosts/enchiridionfamiliae.com/httpdocs/cabecera.php</b> on line <b>29</b><br />
INICIO CRONOLOGICO DOCUMENTOS ESCRITURA CONCILIOS PAPAS AUTORES LUGARES MATERIAS EDICIONES
EDITORES

Warning: Undefined array key "codigo" in /var/www/vhosts/enchiridionfamiliae.com/httpdocs/z_componer2.php on line 7

Warning: Undefined array key "buscado" in /var/www/vhosts/enchiridionfamiliae.com/httpdocs/z_componer2.php on line 9

[2021] • JUAN PABLO II (1978-2005) • LA DEFENSA DE LA IDENTIDAD DE LA FAMILIA

Del Discurso Con piacere, a los Presidentes de las Comisiones Episcopales para la Familia y la Vida, 13 junio 2003

2003 06 13 0002

2. Ciertamente, hoy la identidad de la familia está sometida a amenazas deshumanizadoras. Perder la dimensión “humana” en la vida familiar lleva a poner en tela de juicio la raíz antropológica de la familia como comunión de personas. Así, van surgiendo, casi en todo el mundo, alternativas falaces que no reconocen la familia como un bien valioso y necesario para el entramado social. De este modo, a causa de la falta de responsabilidad y de compromiso con respecto a la familia, se corre el riesgo de pagar, por desgracia, un elevado precio social, y las consecuencias las sufrirán especialmente las generaciones futuras, víctimas de una mentalidad nociva y confusa, así como de estilos de vida indignos del hombre.

2003 06 13 0003

3. En la Europa de nuestros días la institución familiar experimenta una preocupante fragilidad, que resulta mayor cuando las personas no están preparadas para asumir sus responsabilidades en su seno con una actitud de entrega recíproca plena y de verdadero amor.al mismo tiempo, es preciso reconocer que numerosas familias cristianas dan un consolador testimonio eclesial y social:viven de modo admirable esta entrega recíproca en el amor conyugal y familiar, superando dificultades y adversidades. Precisamente de esta entrega total brota la felicidad de la pareja, cuando se mantiene fiel al amor conyugal hasta la muerte y se abre con confianza al don de la vida.

2003 06 13 0004

4. En las sociedades actuales de Europa emergen tendencias que no sólo no contribuyen a defender esta fundamental institución humana, como es precisamente la familia, sino que también la atacan, haciendo más frágil su cohesión interior. Difunden una mentalidad favorable al divorcio, a la anticoncepción y al aborto, negando de hecho el auténtico sentimiento del amor y atentando en definitiva contra la vida humana, al no reconocer el pleno derecho a la vida del ser humano. Ciertamente, son numerosos los ataques contra la familia y la vida humana, pero, gracias a Dios, son muy numerosas las familias que permanecen fieles, a pesar de las dificultades, a su vocación humana y cristiana. Reaccionan a los ataques de cierta cultura contemporánea hedonista y materialista, y se van organizando para dar juntas una respuesta llena de esperanza. La pastoral familiar es hoy una tarea prioritaria, y se registran signos de renovación y de un nuevo despertar de las conciencias en defensa de la familia. Me refiero aquí a algunas intervenciones legislativas, así como a oportunos incentivos para frenar el avance del invierno demográfico, que se nota mucho más en Europa. Aumentan los movimientos en favor de la familia y de la vida; se consolidan y constituyen una nueva conciencia social. Sí, los recursos de la familia son innumerables.

2003 06 13 0005

5. Quisiera renovar aquí mi invitación a los responsables de los pueblos y a los legisladores para que asuman plenamente sus compromisos en defensa de la familia y favorezcan la cultura de la vida. Se celebra este año el vigésimo aniversario de la publicación, por parte de la Santa Sede, de la Carta de los Derechos de la Familia. Presenta los “derechos fundamentales inherentes a la sociedad natural y universal que es la familia”. Se trata de derechos “expresados en la conciencia del ser humano y en los valores comunes a toda la humanidad”, que “derivan, en última instancia, de la ley que está inscrita por el Creador en el corazón de todo ser humano” (cf. Introducción). Espero que este importante documento siga dando un apoyo y una orientación eficaces a cuantos, de diferentes maneras, ejercen funciones y responsabilidades sociales y políticas.

María, Reina de la familia, inspire y sostenga vuestros esfuerzos en las comisiones “Familia y vida” de vuestras respectivas Conferencias episcopales, para que las familias cristianas de Europa sean cada vez más “iglesias domésticas” y santuarios de la vida.

Con estos deseos, avalados por la oración, invoco la constante ayuda divina sobre vuestras actividades, a la vez que os bendigo de buen grado a todos.

[OR (ed. esp.) 20-VI-2003, 3]